Cuidado de los ojos en vacaciones
La Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que más de tres millones de personas cada año quedan ciegas por causa de un exceso de radiación solar; por ello con la llegada de las vacaciones y el ‘bronceado’ la salud visual debe protegerse.
La exposición a la luz solar directa durante más tiempo del estrictamente necesario puede ocasionar resequedad ocular e irritaciones, así como quemaduras en la córnea; los rayos ultravioleta pueden dañar irreversiblemente la retina de los ojos y llegar a causar ceguera permanente.
La exposición al sol sin control también puede causar enfermedades como:
Pterigios: son crecimientos anormales de tejido por inflamación de la superficie externa del ojo.
Pingüecula: es un tumor común y benigno del tejido delgado y transparente del ojo.
Degeneración macular: es un trastorno que destruye lentamente la visión central y aguda, lo que dificulta la lectura y la visualización de los detalles finos.
Cataratas: opacidad del cristalino del ojo.
‘Hágase el de las gafas’
Por todo lo anterior, es importante el uso de gafas con factor de protección contra los rayos UV, especialmente durante la mañana, cuando los ojos están más sensibles; también es necesario que estas sean adquiridas en lugares autorizados.
Actualmente se cuenta con la posibilidad de ponerle a las gafas de sol, la formula oftálmica y contar con la asesoría profesional de un optómetra, que le ayudará a encontrar las que más se ajusten a sus necesidades, actividades cotidianas y de entretenimiento, sin olvidar su estilo personal.
Para evitar daños en los ojos se recomiendan los siguientes cuidados antes de exponerse al sol:
-Evitar largas exposiciones al sol y no mirarlo nunca directamente ni con gafas ni en días nublados.
Prescindir del uso de lentes de contacto cuando se va a nadar, y si son necesarios, procurar que sean desechables.
-Utilizar lentes que bloqueen el 100% de los rayos UV, durante los días y las horas en que la luz solar sea intensa. Las gafas oscuras sin filtro o que presenten un filtro de mala calidad pueden ser incluso contraproducentes, pues hacen que las pupilas de los ojos se dilaten más de lo normal y por lo tanto, sean más sensibles a la radiación por una mayor entrada de rayos UV.
-Procurar el uso de gafas protectoras al tomar baños en piscinas, ya que el cloro del agua de muchas de ellas puede causar irritación que hará que los ojos sean más sensibles a la radiación solar.
-Proteger los ojos de lesiones oculares al realizar deportes al aire libre.
-Mantener siempre limpios los párpados y zonas próximas a los ojos de restos de polvo o arena o de secreciones. Es importante limpiar constantemente los parpados con agua manteniéndolos siempre cerrados.
-Poner gafas de sol a los niños es también de suma importancia, pues está demostrado que más de la mitad del tiempo que pasamos expuestos al sol en nuestra vida se da antes de los 16 años.
-Usar careta y protección si se va a realizar un deporte en especial en agua salada. En general en el mar no vamos a tener problemas de visión si el agua está limpia.