La luz LED cada vez está más presente en nuestras vidas gracias a los diferentes aparatos electrónicos que utilizan este tipo de tecnología  están presente en los semáforos, en la iluminación, dispositivos domésticos como móviles, consolas y televisores.

Se han vuelto tan indispensables para algunas personas que son casi imprescindibles para el vivir día a día por ejemplo los teléfono inteligentes, tabletas ya sea para el trabajo o para los momentos de ocio. De tal modo, que solemos pasar una gran parte de nuestro tiempo expuestos a la iluminación LED que brota de la pantalla de estos dispositivos.

El ojo humano no está preparado para mirar directamente a la luz artificial no es buen amigo de nuestra vista, por lo que una exposición por mucho tiempo a estas fuentes de luz podría causar daños irreversibles en nuestra vista y la retina.

La retina es un tejido sensible en el fondo del ojo que nunca se regenera. “Se nace y muere con la misma retina”, explica la investigadora de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), Celia Sánchez Ramos, que ha dirigido este estudio sobre los daños oculares causados por dispositivos LED.

Reconocidos  científicos de la Universidad Complutense de Madrid. Liderado por la Dra. Celia Sánchez-Ramos, este equipo se ha centrado en el daño que causa la luzLED en la retina humana, en concreto, de la parte tóxica de esta luz, es decir, la parte azul del espectro. En sus experimentos exponían células de epitelio pigmentario de la retina de donantes humanos a luz LED directa, de diferente intensidad durante 72 horas en ciclo circadiano. Los resultados fueron contundentes: el 93% de las células morían cuando no tenían protección.

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