Síntomas de una mala visión
Los problemas de visión presentan diversos síntomas que generan dolor, molestias y, en ocasiones, incluso llegan a ser debilitantes, es muy importante que visite a su oftamólogo y una revisión para determinar con precisión el problema ocular y cómo se lo puede solucionar.
- Visión borrosa o distorsionada
La visión borrosa o distorsionada a largo plazo puede tener diversas causas de fondo. En la gran mayoría de los casos, es el resultado de un simple error refractivo que hace que la luz se enfoque en un punto distinto al que debe enfocarse en la parte posterior de la retina.
- Dificultad para ver objetos cercanos
La visión corta, o miopía, es un tipo de error refractivo en el que los globos oculares son muy largos desde la parte anterior del ojo a la posterior. Los pacientes que sufren este trastorno, que es congénito, pueden ver perfectamente los objetos que se encuentran muy cerca de su rostro, pero su visión se vuelve cada vez más borrosa a medida que la distancia con el objeto aumenta.
- Dificultad para ver objetos lejanos
En contraste con la miopía, la hipermetropía hace que las personas vean bien de lejos. Este error refractivo aparece cuando los globos oculares son muy cortos y hace que los objetos lejanos se vean con mayor nitidez que los cercanos.
- Visión nublada
La visión nublada, trastorno en el que la imagen visual se oscurece como si el paciente estuviera mirando a través de una neblina.
- Pérdida de la visión periférica
Para ver bien los mínimos detalles de un objeto debemos concentrarnos en él con la parte central de la visión, nuestra visión periférica también es muy importante. Poder detectar movimientos en los límites de nuestro campo visual nos permite percibir peligros inminentes (como automóviles que no frenan ante las señales de detención) y reaccionar instintivamente.
- Picazón y ojos acuosos
Tener picazón en los ojos y los ojos acuosos durante un tiempo prolongado es uno de los problemas de la visión más frecuentes. Estos síntomas suelen indicar que el paciente sufre de algún tipo de alergia ocular al polen, al pelo de mascotas o a otra sustancia externa del ambiente. Los ojos a menudo se enrojecen y aparece una sensación de malestar agudo, aunque no es habitual que se registre una pérdida significativa de la visión.