Después de un examen visual el oftamólogo te dice que tu hijo/a necesita usar lentes, hay que tener en cuenta algunas recomendaciones para escoger las mejores para ellos.

En los primeros años de vida los lentes son el mejor método para la corrección visual.

A partir de los 3 años tu hijo/a pueda elegir sus gafas y que el participe en la elección da la garantía que los usara ya sea por el color y forma de la montura o la decoración de la patilla puedes dejarlos a su elección.

 

Como padres  los consejos para escogerlos son:

• Si tiene de 3 a 6 años es  recomendable que la montura sea blando, pues en caso de accidente este material resulta más suave y seguro.

• Si tu hijo/a tiene mas edad se puede utilizar  montura metálicas , aunque depende mucho del tipo de metal del que  estén fabricadas.

• La mayoría de los lentes para los infantes son realizadas de material orgánico; esto significa que son más resistentes y ligeras, pero también son más fáciles que se rayen.

• En algunos lentes para niños se sustituyen las patillas comunes por unas bandas elásticas para que impidan que se caigan o las pierdan.

• Hay otros lentes que traen patillas con bisagras elásticas que estas se adaptan al crecimiento del niño.

• El cristal del lente es recomendable que sean orgánicos para que no se rompan si se les caen o si se golpean mientras juegan.

• Los lentes de policarbonato o materiales parecidos, que aseguran que el cristal es fino, pero duro.

• Si se trata de niños demasiado inquietos o con mucha hiperactividad, pueden optar por la línea deportiva: gafas con talones de silicona en las patillas para evitar que se les claven en caso de golpes.

 

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